Por Emano Aharon
El Range Rover Sport del 2025 llega al mercado con una misión clara: reafirmarse como una de las SUV deportivas de lujo más completas, elegantes y capaces de la industria. Desde su primera generación, este modelo ha logrado una mezcla difícil de replicar: la sofisticación de un Range Rover tradicional con un comportamiento dinámico más agresivo, orientado hacia quienes buscan un manejo más estimulante sin renunciar al confort absoluto.
La generación 2025 consolida esa esencia con mejoras en su plataforma, motorizaciones más eficientes y potentes, un interior profundamente modernizado y tecnología de punta que redefine lo que significa conducir un SUV premium. Durante nuestra prueba, quedó claro que el Range Rover Sport ya no es solo un vehículo de lujo: es un escaparate tecnológico que combina fuerza, elegancia y deportividad de forma magistral.
Datos:
El Range Rover Sport se construye sobre la plataforma MLA-Flex de Land Rover, una arquitectura modular que mejora la rigidez estructural, reduce vibraciones y optimiza espacio interior. Está disponible con distintas variantes mecánicas, incluyendo motores mild-hybrid, híbridos enchufables y versiones de alto desempeño.
Su diseño exterior mantiene la sobriedad característica de la marca británica, pero con proporciones más atléticas, una postura baja y elementos aerodinámicos que le aportan una estética más contemporánea. Las dimensiones equilibradas lo hacen ideal tanto para ciudad como para carretera, y los acabados exteriores exhiben el mismo refinamiento artesanal que ha distinguido al fabricante.
Tren Motriz:
Dependiendo de la versión, el Range Rover Sport puede equipar motores de seis cilindros en línea con asistencia híbrida ligera o una variante híbrida enchufable que supera los 500 caballos de fuerza combinados. En todos los casos, la entrega de potencia es suave, progresiva y profundamente refinada, acompañada de una transmisión automática de ocho velocidades que responde con precisión milimétrica.
El motor más destacado es el sistema P550e PHEV, que combina un motor de combustión con un motor eléctrico de alta potencia y una batería de gran capacidad. El resultado es una aceleración sorprendente, un torque inmediato y la capacidad de circular en modo eléctrico puro durante recorridos urbanos sin esfuerzo.
A nivel dinámico, la suspensión adaptativa mantiene el cuerpo del vehículo firme incluso en maniobras exigentes, mientras que la dirección asistida eléctrica ofrece una retroalimentación precisa sin sacrificar suavidad. El Sport 2025 no solo es potente: es predecible, equilibrado y perfectamente controlado.
Diseño de interiores:
Entrar al Range Rover Sport es ingresar a un ambiente que fusiona minimalismo moderno con lujo tradicional británico. El habitáculo está revestido con materiales premium como cuero Windsor, maderas naturales, aluminio cepillado y superficies táctiles de alta calidad. La sensación de amplitud se debe tanto a la arquitectura de la cabina como al uso inteligente de líneas horizontales, iluminación ambiental y un diseño que fluye armoniosamente entre cada panel.
Los asientos delanteros, profundamente ergonómicos, ofrecen múltiples configuraciones, masaje, ventilación y calefacción. En la parte trasera, el espacio es amplio y cómodo, ideal para travesías largas o uso ejecutivo.
Las pantallas táctiles de nueva generación, la consola central flotante y el panel digital completamente configurable elevan la experiencia a niveles comparables con la industria automotriz de más alta gama. Todo está diseñado para que el conductor pueda controlar funciones complejas sin distracciones, con una interfaz limpia, intuitiva y elegante.
Tecnología al día:
La tecnología es una de las áreas donde el Range Rover Sport marca una diferencia evidente. El sistema Pivi Pro se presenta más rápido, más fluido y más completo que nunca. Ofrece navegación 3D, actualizaciones inalámbricas, integración completa con smartphones y un nivel de personalización notable.
Otros elementos tecnológicos destacados incluyen:
- Sistema de sonido Meridian Signature con una claridad sonora excepcional.
- Asistente de voz con inteligencia artificial, capaz de operar funciones del vehículo mediante comandos naturales.
- Cámara panorámica 360° con vista transparente del capó para off-road.
- Suspensión neumática inteligente que se ajusta automáticamente al estilo de manejo.
- Gestión energética avanzada en versiones híbridas.
Esta suite tecnológica hace que el vehículo se sienta más intuitivo, más conectado y más competente en cualquier situación.
Seguridad:
El Range Rover Sport incorpora uno de los paquetes de seguridad más completos del segmento. Entre sus tecnologías destacan el frenado autónomo de emergencia, el monitoreo de punto ciego, la asistencia de mantenimiento de carril, el control crucero adaptativo y un sistema de detección de fatiga del conductor.
La estructura del vehículo absorbe impactos de manera eficiente, mientras que sus múltiples sensores y radares permiten una anticipación de situaciones de riesgo con gran precisión. La seguridad pasiva y activa trabajan de manera sincronizada, creando un entorno de protección continuo para todos los ocupantes.
Pero lo que más destaca es la sensación de control absoluto que brinda el vehículo. Incluso en condiciones climáticas adversas, el Sport del 2025 mantiene aplomo, tracción y estabilidad, gracias a sus sistemas electrónicos de gestión de frenado y torque.
Probándola:
Durante nuestra prueba, el Range Rover Sport dejó claro por qué es una de las SUV deportivas de lujo más respetadas del mercado. Su aceleración es contundente pero refinada, sin vibraciones ni sonidos excesivos. El torque del motor híbrido permite incorporaciones a autopista rápidas y sin esfuerzo, mientras que la suspensión adaptativa filtra irregularidades sin transmitir movimientos bruscos a la cabina.
En curvas, el cuerpo del vehículo se mantiene sorprendentemente firme gracias al Dynamic Stability Control y a la suspensión electrónica. El volante transmite una sensación de precisión que no se esperaba en un vehículo de su tamaño, y la dirección trasera opcional mejora la agilidad en espacios reducidos.
En ciudad, la conducción es silenciosa, suave y extremadamente cómoda, mientras que en carretera la sensación es de confianza absoluta. El Sport 2025 se comporta como un vehículo premium en todo sentido: potente cuando se necesita, silencioso cuando se desea y siempre estable.
Para concluir:
El Range Rover Sport es más que una SUV de lujo con pretensiones deportivas: es una obra de ingeniería que combina tecnología, diseño, potencia y refinamiento en un solo paquete. Con su tren motriz electrificado, su interior exquisito, su comportamiento dinámico y su arsenal de tecnología avanzada, esta camioneta reafirma su liderazgo entre las SUV deportivas premium.
Es un vehículo pensado para quienes desean lo mejor de ambos mundos: confort absoluto y rendimiento capaz de emocionar cada vez que el acelerador toca el piso. El Range Rover Sport del 2025 no solo cumple expectativas; las supera con autoridad y elegancia.
























